Sarbide Music entrevista a Freedonia, una banda de referencia en la escena nacional de música soul y funk formada por una voz incendiaria y ocho músicos que rezuman creatividad, poseen una potente sección rítmica y ofrecen un directo demoledor.

El grupo madrileño nació en 2006 y lo que comenzó como una aventura de amigos fue creciendo hasta convertirse en un auténtico estruendo musical que cuelga constantemente el cartel de “entradas agotadas” y logra ser Trending Topic en España.

En 2012 la banda graba su primer disco homónimo y dos años después arrasa con Dignity and Freedom, dos trabajos que les han colocado en la cima de las músicas negras. En 2017 publica Shenobi, un doble álbum que retrata el estado actual de la formación y los medios lo han anunciado como uno de los discos nacionales más esperados del año.

En Sarbide Music hemos querido hablar con ellos sobre música y sobre su visión particular del entorno musical. ¡Espero que disfrutéis de la entrevista!

¿Cuántos años lleváis en este mundo de la música?

Somos un grupo numeroso y cada uno tiene su historia, en general llevamos muchos años, esto es una carrera de fondo, por concretar como banda llevamos algo más de 10 años juntos.

¿Cuál fue el impulso para empezar a tocar y crear música?

Unos cuantos coincidimos en una escuela de música, el primer objetivo fue tocar juntos y conseguir financiarnos unas “vacaciones” en la playa tocando por chiringuitos y paseos marítimos. Aquello funcionó y nos gustó, empezamos a ampliar objetivos, los componentes se fueron consolidando, y así hasta hoy.

¿Habéis recibido clases de música, instrumentos, etc.? ¿Lo consideráis importante o necesario?

Sí que las hemos recibido prácticamente todos, la formación es muy importante porque te facilita un montón de herramientas para poder trabajar, resuelve “misterios” armónicos y te da la técnica necesaria para tocar lo que quieres tocar y no lo que puedes tocar.

¿Vuestra música refleja los gustos musicales de lo que escucháis habitualmente o de lo que escuchabais desde niños?

Todo está dentro de cada uno, no sólo lo que escuchas o escuchaste, si no lo que escucharon los músicos que hacen la música que escuchas o escuchaste. Esa es la grandeza cultural de la música; todas las notas importan y llevan consigo millones de emociones acumuladas durante siglos.

Entre compone o tocar , ¿con qué os sentís más a gusto?

Componer, producir, grabar, tocar… todo forma parte del mismo círculo y todo tiene su momento, en nuestro caso lo hacemos de forma continua y disfrutamos mucho de todo el proceso.

¿Os gusta asistir a bolos de otros grupos?

Por supuesto, aparte de divertido es muy enriquecedor y te mantiene en contacto con el resto de artistas.

¿A la hora de decidiros a sacar un disco: qué es lo más difícil?

Toda la parte “empresarial”, es duro pero necesario.

¿Habéis tenido experiencias con sellos discográficos? ¿Qué tal fueron?

En nuestro caso sólo hemos tenido acuerdos puntuales de fabricación y distribución con “Sweet Records”, sello de música negra que crearon los “Sweet Vandals”, con ellos lanzamos nuestros dos primeros discos y todo fue estupendo. En este último hemos funcionado nosotros mismos como sello y es muy pronto todavía para hacer una valoración, pero estamos muy contentos por cómo están yendo las cosas.

¿Cómo veis el panorama musical en vuestro estilo?

Cada día mejor, hay cada vez más bandas de buena calidad y también más público que acude a los conciertos y consume nuestra música.

¿Conocéis todas las posibilidades de la promoción digital?

Es un mundo muy amplio en el que cotidianamente surgen muchas oportunidades, algunas no dan resultado inmediato aparentes, otras son muy potentes pero hay que ir con cuidado… es un campo que nos interesa mucho y en el que tratamos de ampliar horizontes continuamente.

¿Y de los aspectos legales y la gestión de derechos?

Por fuerza estamos bastante al día, somos Creative Commons y la Sgae mira hacia otro lado cuando se trata de la gestión de derechos licenciados bajo Estas licencias porque creen que éstas van en contra de sus intereses. Nosotros creemos que son más justas y completas para el autor y la sociedad, y para poder responder ante la continuada vulneración de nuestros derechos estamos al día de todas las posibilidades y buscando siempre nuevas.

¿Qué objetivos tenéis para los próximos 2 / 3 años?

Tocar, componer, producir, grabar… en definitiva trabajar en lo que nos interesa y seguir compartiéndolo con nuestro público.

¿Creéis que se puede vivir como profesional de la música? ¿En qué estilos?

En el marco actual es harto difícil pero no imposible, en cuanto a estilos todos son buenos si la música es de calidad y parte del corazón.

¿Cómo veis la labor de la crítica?

Muy necesaria siempre que se haga de forma constructiva e independiente.

¿Crees que la afición a la música está en un buen momento?

La música le gusta a todo el mundo, cada vez hay más plataformas disponibles con un amplio acceso y eso es positivo.

¿Dónde ves hoy la mejor conexión entre los músicos y los aficionados?

Claramente en los directos y en las redes y plataformas digitales, hoy en día se puede conectar e integrar al público en el proyecto.

¿Cómo crees que está hoy la música en vivo?

Necesita claramente una revisión importante, el modelo de negocio, la gestión de derechos… hay mucho por hacer.

¿Qué grado de motivación tiene hay día tocar música en directo para los artistas?

Forma parte de nuestro trabajo, tocar en directo es quizás de las cosas más reconfortantes y más visibles, pero hay mucho esfuerzo y horas de trabajo detrás, si no te satisface todo en conjunto mejor haz otra cosa.

Dentro de todas las expresiones de la música, ¿ves cambios en el futuro próximo dignos de mencionar y tener en cuenta?

Quizás que tiene que llegar ese cambio de modelo de negocio que comentábamos, y con él una mejora en la calidad de los proyectos y una dignificación de la profesión.

De hecho ese mayor acceso a la cultura a través de las plataformas digitales está dando sus frutos… quién sabe.

¿Ves algún estilo musical que se haya adaptado mejor que otros a los nuevos tiempos y formas de consumir la música?

Realmente las etiquetas son muy difusas y no acaban de encajar bien con la realidad musical, la música emociona en cualquier dirección o no emociona, la minoritaria es tan importante o más que el main stream, cada una tiene sus momentos. Detrás de eso hay intereses económicos y modas más o menos impostadas que van y vienen, no sabría decir si alguna en concreto se adapta mejor a los nuevos tiempos.

Por último: animad a la gente a que se decida a coger un instrumento y empezar a crear música.

Dinos algo esperanzador sobre el futuro de la música

La música que llevamos dentro nos llega impregnada de las vivencias de generaciones pasadas que la tocaron, cantaron o bailaron. Conecta con nuestros antepasados y con nuestros sentimientos a través de los suyos, es un legado que todos podemos explorar, nos hace humanos y nos acompaña y socializa. Tocar un instrumento es conectar tu lado más íntimo y secreto con el del resto de las personas, no hay mentira ni maldad, sólo música. Comprender los mecanismos musicales y aprender a tocar un instrumento no tiene edad, nunca es tarde, y cuando se supera la barrera del duro aprendizaje inicial sólo aporta satisfacciones. Todo el mundo debería hacerlo porque hay tantos músicos como personas, y todas tienen algo que decir.

Como algo esperanzador diría que antes de poder hablar o escribir el ser humano hacía música, por tanto no hay que preocuparse, mientras existan personas habrá música que las emocione.

Muchas gracias